Tras dos semanas de conflictos con el Gobierno local, los bares, restaurantes y pubs de La Matanza podrán abrir con mesas en las veredas. “El permiso comenzará a regir desde mañana 2 de octubre y será una prueba piloto”, confirmó a este medio un funcionario del municipio que conoce de cerca el trabajo de los inspectores.
Tal como ya ocurrió en Morón e Ituzaingó, los gastronómicos de La Matanza llegaron a un acuerdo con el intendente Fernando Espinoza, aunque por el momento no habrá anuncio oficial. “Se permitirá colocar mesas en las veredas, al aire libre, sin permiso de ingresar al salón. Si resulta bien, seguiremos avanzando”, explicó la fuente consultada.
El protocolo será similar al dispuesto en la Ciudad de Buenos Aires: mesas con dos metros de distancia y hasta cuatro comensales sentados. Además, habrá a disposición alcohol en gel y las cartas serán sanitizadas ante cada cambio de cliente. La particularidad en La Matanza es que a las 0 horas todos los bares deberán cerrar sus puertas. Un gastronómico de San Justo explicó que “la prueba piloto será en principio por quince días”.
Por su parte, el funcionario municipal expresó que “se registrará el comportamiento del público y de los comerciantes, y si todo sale bien y cumplen con el protocolo y el distanciamiento social, se avanzará en más permisos”. En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, ya se habilitó el ingreso a los patios y terrazas de los locales gastronómicos.
El alivio para los dueños de bares y restaurantes llega luego de días de reclamos, que incluyeron desde un corte total en la rotonda de San Justo hasta el encadenamiento en el Palacio Municipal. “Nos estamos fundiendo”, expresaron desesperados varios gastronómicos del municipio. Por ahora, llega el alivio.
