La espada principal del macrismo en Morón sur, Nicolás Canario, rompió filas con el intendente Ramiro Tagliaferro y pidió su interpelación. El concejal creó el bloque unipersonal Argentina de Pie, tras denunciar al jefe comunal por maniobras extorsivas, corruptas y hacerlo responsable de una campaña política sucia y denigrante hacia el vecino.
“No puedo seguir siendo cómplice del más descarado de los clientelismos políticos nunca antes vistos en la historia de este distrito electoral”, escribió Canario en una carta dirigida a la presidenta del Concejo Deliberante, Analía Zappulla. Unas líneas antes, el concejal había adelantado que tomaba la decisión por “los lamentables hechos políticos que son de público conocimiento y que se vienen sucediendo sin solución de continuidad y cada vez con mayor gravedad y descaro”.
Según Canario, intentó en “múltiples oportunidades” hacerle saber a Tagliaferro estas diferencias pero no fue ni “recibido ni atendido siquiera telefónicamente” por lo que “no puedo sino lamentar amargamente las hipócritas y absurdas contradicciones entre lo que se señaló como proyecto político cuando ingresé en las filas de este partido, y las manifestaciones prácticas de la nefasta conducción de su jefe político”, se quejó.
Graves irregularidades
Luego, el concejal enumeró una serie de situaciones que la oposición local ya viene advirtiendo: “el desabastecimiento de medicamentos en el hospital municipal; la violencia moral ejercida contra empleados del estado para realizar actividades de campaña; la malversación de recursos públicos para provechos particulares, la captación del voto de los más vulnerables a través de prebendas de la más baja categoría”.
Canario también se mostró molesto por “la incoherencia de pretender ahora negar a quienes fueron los referentes nacionales y provinciales indiscutidos de este espacio”. El edil resumió que todas estas actitudes responden al “inocultable desinterés por los vecinos de Morón y del poco respeto del Sr. Intendente Municipal por las instituciones republicanas que han sido avasalladas hasta su máxima expresión, en el autoritarismo con que se ha manejado esta gestión”.
Extorsiones y corrupción
“Las prácticas abusivas y extorsivas a las que nos han querido acostumbrar, han destrozado los reglamentos, avasallado garantías y vulnerado todo tipo de procedimientos”, describió Canario, al tiempo que insistió: “Las irregularidades en el manejo de los fondos públicos, el recurso a la constitución de oscuros contratos inexplicables, para evitar los mecanismos trasparentes de la licitación pública, el destrato a diversos funcionarios (en todo tipo de niveles), el autismo y la soberbia del Sr. Intendente Municipal así como las desesperadas maniobras por llevar adelante una campaña de mentiras, en vez de utilizar la verdad y el compromiso real con los ciudadanos, como instrumento de gestión, me llevan a tener que tomar, como digo, esta tan drástica, amarga y no buscada decisión”.
Pedido de interpelación
Nicolás Canario no dudó en tratar a Tagliaferro como “un patrón de estancia que pretende manejar un municipio de cuatrocientos mil habitantes como si fuera su empresa personal” tras lo cual pidió, en caso de contar con los votos suficientes, su interpelación: “para que explique y justifique el origen de los fondos utilizados para adquirir las dádivas que obliga a los empleados municipales a repartir entre las personas más vulnerables, y nos haga comprender por qué hasta las chapas y los colchones con los que se cohecha a la gente más humilde, llevan su nombre personal a veinte días de las elecciones”.
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