VIDEO | Robo piraña en Ramos Mejía: en seis motos asaltaron a una joven y su madre, quien les tiró gas pimienta

Ante la resistencia de la mujer, los delincuentes sólo pudieron llevarse las llaves de la casa y del auto.

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Al menos doce delincuentes que se movilizaban en unas seis motos asaltaron bajo la modalidad piraña a una mujer y su hija que salían de su casa, en la localidad de Ramos Mejía, partido de La Matanza. La mayor de las víctimas se resistió al robo al rociar con gas pimienta a todos los asaltantes.

El incidente, según se supo en las últimas horas, ocurrió a las 20:30 del sábado en Berutti al 200, cerca de la intersección con Bolívar, y a unas doce cuadras del centro de la la localidad.

Cuando las dos mujeres, Viviana y su hija, se aprestaban a salir en un auto estacionado en la puerta de su casa, aparecieron seis motos con doce jóvenes a bordo, con claros intenciones de robo.

Las víctimas intentaron escapar a la carrera, pero fueron rápidamente encerradas por los delincuentes, que le pidieron a Viviana las llaves del auto. 

Viviana se resistió al asalto, forcejeó con uno de los ladrones y sacó un gas pimienta que llevaba y roció a todos los delincuentes, los que comenzaron a sufrir los efectos del mismo.

Uno de los asaltantes, el que se había apoderado de la llave del vehículo, intentó abordarlo pero no pudo por las consecuencias del gas pimienta. Todos los delincuentes se fueron en las motos, con un magro botín compuesto por las llaves del auto y de la casa. 

Al relatar los hechos, Viviana contó a Canal 9 que todo ocurrió cuando se preparaba para llevar a su hija a un cumpleaños que se celebraba en la Capital Federal.

“Es ella (su hija) la que los vio primero, yo estaba acomodando el bolso, salimos corriendo pero quedamos atrapadas por el auto de la vecina, que se encontraba atravesado en la vereda”, relató.

“Yo forcejeo y como soy muy liviana me arrastran, me sacaron las llaves y pude agarrar el gas pimienta. Los rocié a todos y por eso no pudo llevarse el auto”, explicó. 

Viviana reconoció que su acto fue “temerario”. “Estaba enajenada, no podía intelectualizar lo que hacía. Tenía que defender mi auto. Hasta le gritaba cosas cuando se iban y uno de los delincuentes me apuntó con un arma. Mi hija me gritó y me refugié atrás de un auto”, recordó la mujer, es insistió que lo ocurrido “podría haber tenido un desenlace peor”.

Daniel Bracamonte, del foro de seguridad de Ramos Mejía, señaló a No Ficción Web hace unos días atrás que “los robos piraña son cada vez más habituales” en la zona. “No hay controles a las motos en banda, y cada vez son más violentos. Se manejan con total impunidad”, alertó.

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