Morón: rechazaron la rendición de cuentas del último año de Tagliaferro por sospechas de corrupción

Con el fuerte cruce mediático entre Faravelli y Laviuzza de antesala, los concejales del oficialismo y sus aliados no convalidaron el balance económico del 2019.

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El Concejo Deliberante de Morón rechazó la Rendición de Cuentas del último año de gestión del ex intendente Ramiro Tagliaferro. Según un comunicado del mismo municipio, se constató “la existencia de empresas fantasmas, contrataciones a amigos de funcionarios, mercadería faltante, desaparición de expedientes y una voluminosa deuda pública que supera los 1.200 millones de pesos”.

En la sesión solo estuvieron presentes 14 concejales, ya que el bloque de Cambiemos decidió ausentarse luego de la denuncia realizada por la presidenta de la bancada macrista, Natalín Faravelli, en la que acusó al presidente del cuerpo, Jorge Laviuzza, por presunta discriminación. Con trece votos a favor (se abstuvo Alejandra Liquitay, del unibloque opositor Juntos por el Cambio Morón), se impuso la postura del oficialismo y sus circunstanciales aliados, y rechazaron la Rendición de Cuentas del ejercicio 2019.

Los concejales que responden al intendente Lucas Ghi describieron que Tagliaferro dejó las arcas municipales en un “grave estado económico y operativo, con un déficit de 1.400 millones de pesos. Además de la voluminosa deuda pública –que supera los 1.200 millones de pesos y que está siendo renegociada por la actual gestión municipal”.

Durante la sesión, el oficialismo acusó a la gestión pasada por “la contratación a empresas fantasmas, el pago de cuantiosos recursos a compañías sin trayectoria cuyos titulares tienen vínculos directos con funcionarios de Tagliaferro, la compra de mercadería o insumos hospitalarios que nunca llegaron al destino previsto y la asignación de voluminosas pautas publicitarias a portales de internet inexistentes”.

Entre las deudas que destacaron los concejales del Frente de Todos se encuentra la de la empresa de recolección de residuos Urbaser, a la que se le deben 15 quincenas (más de 6 meses) de servicio, por un total superior a los 600 millones de pesos. Además, denunciaron que hubo compras “por casi 11 millones y medios de pesos alimentos secos y frescos, leches para el Hospital de Morón, golosinas, víveres para el Concejo Deliberante y alimentos para mascotas a una empresa cuyo titular es Franco Favini Ragone. Se trata de un amigo de funcionarios de Tagliaferro”.

La sesión se desarrolló en el Teatro municipal Gregorio de Laferrere, acondicionado especialmente para cuidar los protocolos sanitarios del debido aislamiento.

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