Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil: “Este año nos tocó sumarnos a nosotros”, dice Yamila Cagliero

La hermana de Diego Cagliero, el joven asesinado en Martín Coronado por la Bonaerense analizó los excesos de la fuerza y convocó a la quinta movilización de los familiares de víctimas.

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Unas horas antes del comienzo de la quinta Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil, Yamila Cagliero se lamentó: “Este año nos tocó sumarnos a nosotros porque hace tres meses a mi hermano Diego lo asesinó un oficial de la Policía Bonaerense en Tres de Febrero”. La joven convocó a la sociedad para que se sume a la movilización que partirá a las 15 desde el Congreso hasta Plaza de Mayo.

Conferencia de prensa de los familiares de las víctimas.

En diálogo con Último Recurso (FM Fribuay) la hermana del muchacho de 30 años asesinado en mayo en Martín Coronado, partido de Tres de Febrero, reconoció que ya había participado de otras ediciones de esta marcha, pero advirtió que “es la primera vez que le tocó a mi familia y creo que todavía no tomamos conciencia de que esto le puede pasar a cualquiera”.

Esta movilización comenzó a realizarse en Córdoba en 2015, tras la muerte de Ismael Sosa. Luego, los familiares, amigos y allegados de las víctimas se organizaron en diferentes provincias y la marcha se expandió prácticamente a todo el país. “Año a año se van sumando más familiares. Llega un momento en el que somos tantos que no hay explicación y parece que no hay un punto final: en vez de que se tomen medidas para que no suceda más parecería todo lo contrario, que se incentiva para que siga sucediendo y sigan muriendo jóvenes y personas de esa forma”, analizó. 

Diego fue asesinado el 19 de mayo, cuando volvía junto a siete amigos de un velorio. Los jóvenes habían pasado un supermercado Día, donde discutieron con los empleados y personal de seguridad, porque intentaron irse con parte de la mercadería escondida entre sus ropas. Luego de devolver las cosas, se fueron. Pero instantes después, la Bonaerense montó un desmedido operativo que los interceptó en la avenida Márquez, antes de llegar a la esquina de Campo de Mayo. Según confesó el joven que iba manejando la camioneta, se asustó ante la actitud de los efectivos y aceleró. Automáticamente, una lluvia de disparos cayó sobre el vehículo hiriendo a Emanuel Tedesco y a Cagliero, quien falleció.

Los padres de Diego Cagliero exigen justicia.

Por el hecho están presos los agentes Sergio Montenegro, quien hirió a Tedesco, y Rodrigo Canstatt, quien mató a Cagliero. Como si fuera poco, tras el crimen del joven, su familia se enteró que Canstatt había estado involucrado en otra muerte unas semanas antes. Esta trama se conoció públicamente ayer, cuando los familiares de las víctimas hicieron una conferencia de prensa en la sede de la SERPAJ, donde María Laura Romero contó algunos detalles del asesinato de su marido, Sergio Jasi, cuando el 26 de abril tuvo un brote psicótico y se encerró con llave en el baño de un vecino, en Tres de Febrero. Minutos después, la policía llegó a esta casa y se llevó al hombre desvanecido.

“La policía no se ocupa de los narcos, pero sí de atacar a la gente que está enferma”, sostuvo María Laura, quien graficó que su esposo “no tenía armas, ni rehenes, ni nada que pudiera hacerle daño a alguien. Lo único que necesitaba era que lo ayudaran”. “Llegaron cinco patrulleros con dos policías cada uno. En total, entraron 10 policías. A Sergio lo suben desvanecido a la cabina del patrullero y en vez de llevarlo al hospital fueron a la comisaría. De tantos golpes que recibió su cerebro empezó a sangrar y le agarró un paro cardíaco. Llegó muerto al hospital”, continuó María Laura, quien describió que la Bonaerense después catalogó el caso como un intento de robo por escalamiento, algo que los vecinos y testigos de la víctima no convalidan ya que el hombre era maestro mayor de obras y nunca había tenido problemas con la ley.

Yamila Cagliero, la herma de Diego.

Al respecto, Yamila argumentó que “en las actas de procedimiento del hecho de Jasi, aparece el nombre de Rodrigo Canstatt. Nosotros creemos que si se hubiese investigado como correspondía en ese momento tal vez mi hermano hoy estaría vivo, porque a los policías los desafectaron recién después de la muerte de Diego”.

“No hay que olvidarse que este asesino hacía seis meses nada más que estaba en la calle, en seis meses mató a mi hermano y antes estuvo involucrado en el caso de Jasi. Si no nos hubiésemos movido esto hubiera quedado en la nada porque de entrada la policía trató de convencer a mi papá de que mi hermano había estado a los tiros, una ridiculez”, sostuvo Yamilia, quien concluyó que además “el intendente Diego Valenzuela en sus redes sociales felicitó a la policía por haber reducido a un grupo comando armado y haber abatido a un delincuente. Después recibió a mis padres en privado pero nunca les pidió disculpas públicas”. En tanto, la justicia analiza el pedido de Canstatt quien solicitó que se le realicen pericias psiquiátricas porque aseguró estar deprimido.

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