Amenazas de bomba, el delito que más creció en 2017 y no cesa: Allanamiento y detención

Si bien nunca se detuvieron después de la avalancha registrada en el segundo semestre del año pasado, las amenazas de bomba parecen volver a incrementarse durante las últimas semanas de 2018. Fue detenido un menor en González Catán por una llamada a un colegio de San Justo. Conocé las impactantes estadísticas en el oeste.

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Un flagelo sin solución. Las amenazas de bomba a las escuelas reaparecieron con mayor notoriedad en La Matanza donde no sólo hubo denuncias sino también un allanamiento en el que fue detenido un menor e incautados 8 celulares en una vivienda de González Catán. Fue tras una investigación por llamados intimidatorios a la Escuela Educación Técnica N° 4 de San Justo, Juan Manuel Fangio el 2 de julio pasado.

Según pudo confirmar No Ficción la causa, que tramita desde este lunes en el Juzgado Penal Juvenil N° 1 a cargo de Gustavo Pons, demuestra que las autoridades del Ministerio Público Fiscal han intensificado las investigaciones para frenar las amenazas de bomba que el año pasado tuvieron una escalada sin precedentes y dejaron a miles de chicos de la provincia sin clases.

Escuela Técnica 4, en San Justo

 

La semana pasada tuvieron que suspender las actividades el Instituto French de la calle homónima al 100 y la Media Nº 6 José Félix Bogado, en Pueyredón al 1200, ambos de Ramos Mejía, y la Escuela Primaria Nº 8 Bernardino Rivadavia en Tacuarí al 600, Haedo. Este martes en esa localidad moronense también fueron víctimas los alumnos y docentes del Instituto Advéniat, ubicado en la calle Estrada al 200. Para esta modalidad, no hay distinción entre los colegios públicos y privados.

La Matanza y Morón estuvieron entre los departamentos judiciales con más crecimiento de este delito el año pasado, lo que surge de un informe estadístico del Sistema Informático del Ministerio Público (SIMP) de la Provincia de Buenos Aires donde se compara la cantidad de hechos entre 2016 y 2017.

“Crecieron a partir de agosto de 2017 en escuelas principalmente, pero también en otros organismos públicos”, confirmó a No Ficción una fuente del organismo. Después de las elecciones descendió por lo que en un principio los investigadores habían asociado las amenazas con los comicios legislativos del año pasado. Aunque fuentes judiciales confirmaron a este medio que si bien bajaron de manera considerable, las amenazas telefónicas nunca cesaron. “Yo tengo al menos dos por turno”, detalló un funcionario de la justicia de Morón.

En materia judicial se habla de “Delitos contra el orden público” al referirse a aquellos actos que, según el Artículo 211 del Código Penal, causen un temor público o tumultos o desórdenes, y también por dar voces de alarma o amenazas con la misión de un delito de peligro común.

Los números

La Matanza pasó de 9 delitos de orden público en 2016 a tener 524 en 2017, lo que significa un aumento del 5.722,22%. Detrás está el departamento judicial de Morón, que también abarca los municipios de Hurlingham, Ituzaingó y Merlo, que pasó de 61 amenazas en 2016 a tener 1.377 en el 2017, equivalente a un aumento del 2.157,4%.

Sin embargo, el crecimiento más exponencial se registró en el departamento judicial de Moreno-General Rodriguez donde el delito contra el orden público aumentó un 20.200%, ya que hubo sólo una denuncia por amenazas de bomba en 2016 y al año siguiente fueron 203.

Las cifras corresponden a las  investigaciones iniciadas por el Ministerio Público de la Provincia ya sea por delitos consumados como tentados y dieron una voz de alerta para que este año se agudicen las pesquisas.

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