Si querés recibir las noticias del oeste en tu celular o enviar tu comentario, entrá a nuestro Whatsapp. También a Instagram, Twitter y Facebook.
“La indignación es por la inacción policial”, sostuvo Lilian, quien trabaja como chofer de remís, y fue abordada por tres jóvenes a los que describe como menores de edad, uno de ellos armado, y se resistió a entregar las llaves de su auto, al que describió como su “herramienta de trabajo”. Todo ocurrió en la puerta de su casa en la localidad de Isidro Casanova, en el partido de La Matanza.
El indignante episodio se produjo el jueves último poco después de las 16 en Almeira, entre Lavalleja y Alagón, y fue registrado por una cámara de seguridad.
Los tres delincuentes abordaron a Lilian y la vecina comenzó a forcejear con ellos: “Yo tratando de no entregar las llaves del auto, ellos querían el auto. Forcejeamos, me tiraron al piso, tuve unos golpes en la pierna, cortes en una mano y en la cabeza, pero yo estoy bien”, contó la mujer a No Ficción Web.
En ese momento, siempre según el relato de la damnificada, pasaba un patrullero a pocos metros y el policía al volante, al ver la situación dio marcha atrás y chocó en forma leve a un auto estacionado.
Los jóvenes ladrones, al ver el móvil, desistieron del robo, arrojaron al piso la riñonera con dinero y documentos que le habían arrebatado a Lilian y escaparon a la carrera.
“Los policías se bajaron para asistir al coche, al que le habían dado un toque, pero nunca me asistieron. Me podrían haber pegado un tiro y me podría haber estado desangrando”, describió.
Indignante | Una remisera es asaltada en #IsidroCasanova, pasa un patrullero, choca y no asiste a la víctima del robo
— NoFiccionWeb (@noficcionweb) March 9, 2023
Leé en https://t.co/egNmCXOLvd lo que dijo la víctima pic.twitter.com/tKpinWQbju
Lilian llamó al 911 y alrededor de una hora después acudió una patrulla. Posteriormente intentó realizar la denuncia en la comisaría de San Carlos, que tiene jurisdicción en la zona, pero el oficial que le tenía que tomar declaración le aconsejó no hacerla porque “dentro de todo estaba bien y no habían robado nada”. “Me dijeron que me cuide y que haga reposo”, explicó.
“La indignación nuestra es por la inacción policial y los robos son diarios. Esto es tierra de nadie y estamos a la deriva. A la media hora que me robaron a mi, robaron a la vuelta de casa y a las dos horas un neumático a un auto. Un vecino me comentó que le robaron la moto, le dijo a los policías como localizarla por street y le dijeron que no podían porque no tenían patrulleros, que estaban hasta las manos. Cuando vamos a la estación de servicio hay diez autos y veinte motos cargando nafta. ¿Dónde están?”, expresó.
