La Policía Federal desbarató una red de personas que se encargaba de elaborar, acopiar, distribuir y comercializar alcohol en gel en grandes cantidades en el oeste del conurbano. Hay seis detenidos y toneladas del preciado líquido, en tiempos de cuarentena, para su análisis que a priori no cumpliría con su función de combatir el coronavirus. Se llevaron adelante seis procedimientos en Merlo, Moreno y Marcos Paz.
La investigación comenzó en el mes de abril de este año, poco después que comenzara la cuarentena en la Argentina y que la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretara el comienzo de la pandemia por el COVID 19.
El caso, a cargo del juez Federal 3 de Morón Néstor Barral y el fiscal Federal Santiago Marquevich, tuvo un gran impulso el 14 de septiembre cuando se llevaron adelante los seis allanamientos. Tras analizar la gran cantidad de material secuestrado, la mayoría de los detenidos prestan declaración por estas horas ante los funcionarios judiciales.
Los agentes de la División de Investigación de Falsificación y Adulteración de Fármacos de la Policía Federal lograron establecer los diferentes eslabones de esta cadena de comercialización ilegal de alcohol en gel. Según se desprende de la investigación, los productos carecían de rotulado y de los datos requeridos por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT): la identificación completa, denominación y marca, datos legales de inscripción, elaborador o responsable de la comercialización.
Como si fuera poco, los investigadores establecieron que el alcohol en gel que se producía bajo estas circunstancias no podía garantizar “su calidad, seguridad y eficacia, debido a su composición química, ya que poseen un mínimo porcentaje de etanol, por lo que es totalmente nulo su poder de sanitización, representando un riesgo para la salud de la población”.
De acuerdo a la información que accedió No Ficción, el depósito que utilizaba la organización a modo de distribuidora funcionaba en la localidad de Francisco Álvarez, en Moreno, donde el dueño quedó detenido. Allí había diez tanques de 25.000 litros, cuatro tanques de 4.500 litros, tres tanques de 2.500 litros, 112 tanques de 1.000 litros, 156 tanques de 200 litros, siete tanques de 200 litros y dos tanques de 1000 litros.
Todos ellos contenían alcohol en gel y diversas sustancias químicas para el preparado de productos domisanitarios, que son aquellas sustancias destinadas para la limpieza y la desinfección. Además, encontraron 200 tanques de 200 litros y diecinueve tanques de 1000 litros vacíos. Tras secuestrar, inventariar y tomar muestras de todos los elementos se procedió a la clausura municipal.
Al mismo tiempo, los agentes se dirigieron a cuatro locales comerciales donde detuvieron a los dueños: se trata de dos mujeres y dos hombres. Estos procedimientos se llevaron adelante en tres negocios de Merlo y uno de Marcos Paz. En todos estos lugares se secuestraron bidones de 30, 15 y 5 litros, tachos de 250, 240 y 200 litros, envases vacíos y botellas, además de estos elementos químicos con los cuáles rebajarían aún más el producto.
Por último, en un domicilio particular en Merlo, cayó detenido otro hombre. Allí había frascos pequeños y de distintos tamaños de alcohol en gel, de alcohol etílico y gran cantidad de envases plásticos vacíos para fraccionamiento.
