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Un delincuente ingresó en plena madrugada en una casa de Ramos Mejía, donde mantuvo en vilo durante varios minutos a un matrimonio y a sus tres hijos. Bajo amenazas de muerte, el sospechoso se llevó elementos de valor que encontró a su paso y huyó del lugar, tras hacer varias veces ademanes de saludar a los damnificados.
Todo ocurrió cerca de las 5 de la mañana del miércoles y parte de la secuencia quedó registrada en las cámaras de seguridad instaladas de la vivienda. En las imágenes se aprecia que luego de hacer cierta inteligencia, el malviviente saltó el tapial del dúplex, situado en Caupolican al 1500 de la mencionada localidad del partido de La Matanza.
Ayudando presuntamente con un cricket neumático, el sospechoso forzó la reja de la ventana por donde logró ingresar a la casa. El hombre actuó descalzo y apareció de repente en el dormitorio del matrimonio que estaba durmiendo; en el cuarto contiguo estaban los tres hijos quienes afortunadamente no se enteraron del episodio.
#RamosMejía ‼️ Increíble método de robo y un final indignante ⬇️
— NoFiccionWeb (@noficcionweb) November 18, 2021
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Según comentó en Telefé Noticias Paula, la víctima, el delincuente en todo momento los amenazaba de muerte aunque nunca mostró un arma, pero siempre tenía las manos atrás como preparado para sacar una pistola. De la misma manera, el sospechoso simulaba hablar con otra persona que se encontraría en la planta baja, pero todo indica que actuó solo porque no había respuesta del otro lado y en las imágenes no quedó registrado ningún cómplice.
Según relató la mujer, entregaron el dinero y las cosas de valor que tenían a mano, no conforme el agresor insistía con que quería más y les aseguraba que si llegaba a encontrar algo más que no les habían confesado volvía y los mataba.
“Vivimos una situación muy traumática nosotros y nuestros hijos, no sé cómo nos vamos a recuperar de esto”, señaló Paula, al tiempo que recordó que nadie en el barrio advirtió lo que pasaba en el interior de su vivienda.
En las imágenes se observa que el delincuente vuelve a saltar el tapial y amaga varias veces con abandonar la zona y saluda a las víctimas.