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Secuestros, golpes, amenazas, tiros y un cadáver mutilado en la chanchería de un campo forman parte de una serie de hechos violentos cometidos en los últimos tres meses en Ituzaingó, Moreno y General Rodríguez, y que son investigados como el brutal resultado de disputas por la venta de drogas en la zona oeste del Conurbano bonaerense.
El caso más reciente, y que puso en evidencia la aparente vinculación con los anteriores, fue una privación ilegal de la libertad cometida el miércoles último y por la que detuvieron al propietario del predio rural donde nueve días antes había sido descubierto el cuerpo comido por los cerdos.
Una fuente judicial informó a Télam que el 26 de octubre último por la noche, un grupo de delincuentes armados capturó a Cristian Sebastian Fragoli, de 34 años, cuando caminaba por la calle Paganelli 3900 en la Villa Zapiola de Paso del Rey, partido de Moreno, y lo llevó cautivo en un auto hacia la zona de Ituzaingó.
En el trayecto, los captores amenazaron, golpearon y gatillaron contra la víctima para que les dijera dónde se encontraba otra persona a la que buscaban en el marco de un presunto ajuste de cuentas narco.
Las detenciones
Según la fuente consultada, los delincuentes llevaron al hombre en un auto Volkswagen Gol Trend rojo hasta un búnker de drogas de la calle Cosquín al 1900 del barrio San Alberto de Ituzaingó, donde la víctima había ido a comprar estupefacientes anteriormente, y lo mantuvieron cautivo, al tiempo que volvieron a golpearlo para obtener la información que buscaban.
En tanto, un vecino llamó al 911 al advertir movimientos sospechosos y ante la presunción de que había un robo en proceso, por lo que personal policial se trasladó hasta el lugar y detuvo a tres hombres con domicilio en la zona oeste que estaban armadas a bordo de un Volkswagen Vento azul -con pedido de secuestro por robo- estacionado frente al búnker.
También apresaron a otras siete personas en el interior de la casa, donde estaban en pleno proceso de fraccionar drogas, y rescataron a Fragoli. Allí, la Bonaerense secuestró droga fraccionada, una balanza digital, material de corte, una pistola 11,25 con cargador y 8 cartuchos de arma calibre .22, un pistolón calibre 16 sin marca visible y sin cartuchos, un Iphone rosa y cuatro cámaras de seguridad que estaban colocadas afuera del búnker para ver lo que pasaba afuera y si llegaba alguna autoridad, y dos libretas con anotaciones y contactos de presuntos clientes de compra de drogas.
A su vez, uno de los detenidos le contó a los agentes del Comando de Patrullas de Ituzaingó que habían ido hasta ese lugar “porque a un amigo de ellos lo habían secuestrado con la intención de matarlo”.
Cae el dueño del campo
Entres los once detenidos se encontraba una mujer y Miguel Ángel Faure, el dueño del campo donde el 17 de octubre último se halló el cadáver de Andrés Federico Costa , de 34, en una chanchería, y quien tiene domicilio en Ituzaingó.
Faure y los otros sospechosos quedaron a disposición del fiscal Leandro Ventricelli, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, quien investiga la privación ilegal de la libertad de Fragoli.
El viernes último por la tarde todos se negaron a declarar ante el fiscal y por el momento seguirán detenidos por los delitos de “privación ilegítima de la libertad, encubrimiento agravado, tenencia de droga para su comercialización y portación de arma de fuego”.
Para el investigador consultado, estos detenidos podrían estar vinculados a otro hecho enmarcado en disputas por drogas que ocurrió en agosto pasado, cuando dos personas fueron a comprar estupefacientes a General Rodríguez y los narcos balearon a una y a la otra la secuestraron.
Los delincuentes liberaron a esa víctima luego de cobrar un rescate, por lo que se inició una causa en la Justicia Federal de Mercedes por secuestro extorsivo. Mientras que en septiembre se allanó el lugar donde se había iniciado dicho secuestro y se detuvo a una sospechosa que sería la cuidadora de la vivienda.
En tanto que por el crimen de Costa, los pesquisas determinaron que éste trabajaba en el campo de Faure junto a otros dos hombres, uno de los cuales, identificado como Diego Ezcurra, de 28, está detenido por el homicidio.
Ezcurra fue apresado el sábado pasado luego de ser señalado por testigos y se negó a declarar en su indagatoria ante la fiscal de la causa, Alejandra Rodríguez, de la UFI 9 de Moreno-General Rodríguez.
Según los médicos forenses, Costa, cuyos restos se encontraron mutilados por los cerdos, presentaba cuatro heridas de arma de fuego en la cabeza, dos calibre .22 y otro tanto de perdigonadas.
De acuerdo a los pesquisas, esta víctima era oriunda de la provincia de Entre Ríos y tenía antecedentes policiales por infracción a la Ley de Drogas, encubrimiento y tenencia de documento público falso.
Paralelamente, la Policía estableció que el dueño del predio rural donde se halló el cuerpo, situado en Sarratea y Mutiloa, de General Rodríguez, no solo tiene los mismos antecedentes que Costa, sino que también es investigado por el secuestro extorsivo cometido en agosto.
Para los pesquisas, el crimen de Costa fue un ajuste de cuentas entre miembros del mismo grupo que trabajaba en el campo de General Rodríguez y la víctima era allegada a los detenidos el miércoles en Ituzaingó.
