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Un centenar de vecinos de Villa Concepción, de la localidad de San Andrés, en el partido de San Martín, se manifestaron esta semana en las puertas de la comisaría local para reclamar mayores medidas de seguridad. Cortaron la calle, quemaron neumáticos y maderas. Explicaron que desde hace meses padecen diferentes hechos delictivos a toda hora y denuncian que las autoridades municipales y policiales, poco y nada hacen para prevenir los ataques que cada vez son más violentos.
La movilización fue realizada el pasado martes, pero trascendió en las últimas horas. De hecho, No Ficción pudo saber que había presente algunos móviles de televisión de canales nacionales pero por alguna razón el malestar vecinal no fue trasmitido en los noticieros.
“Desde fines del año pasado, estamos sufriendo entre dos y tres hechos de inseguridad por día. La semana pasada me apuraron tres chicos cuando venía con mi auto. Me apuntaron, pude esquivarlos y zafé de la situación”, contó a este medio una de las vecinas que participó del reclamo, quien agradeció que los ladrones no le hayan disparado y que no los embistió, ya que los problemas para ella podrían haber sido aún peores.
Los damnificados explicaron que el problema está focalizado en un radio comprendido por las calles José María Campos, 4 de febrero, Agustín Alvarez y Luís María Saavedra, pegado a la Comisaría Octava de Villa Concepción.
Los sospechosos son una banda de delincuentes que azota el barrio generalmente con el mismo modus operandi: se manejan en grupos de no menos de tres sospechosos, aunque llegan a ser muchos más. “Van caminando por las calles y cuando te ven desprevenido te acosan, cual ataque piraña y te sacan lo que llevas encima. Esto ocurre a cualquier hora, pero después de las 19:00 directamente ya ni salimos”, añadieron.
Por las características que dieron las víctimas, se trataría de menores de edad que incluso no están interesados en llevarse los autos, sino que obligan a los automovilistas a detenerse y saquean todo lo que hay en el interior. Vale decir que siempre están armados.
“Mientras estábamos protestando en la comisaría, los pibes estaban robando en Mendoza y Sarmiento”, comentó otro frentista indignado, quien agregó: “Hay cámaras de la municipalidad pero la policía dice que no funcionan; sin embargo, la gente del Centro Operativo de Monitoreo dicen que sí andan, pero no las muestran”.
“Esta semana le llegaron a gatillar a una señora pero no salió la bala. Empezó a gritar y la arrastraron por todos lados. La salvó la alarma vecinal porque no sé cómo podía terminar todo”, contó otro vecino.
La respuesta policial
Los vecinos coincidieron en señalar que las autoridades de la comisaría se presentaron muy amablemente y dejaron sus teléfonos de contacto, ante cualquier eventualidad. “Se excusaron con que hacía una semana habían llegado a la seccional y aún no tenían hecho el mapa delictivo de la zona. Nos pidieron que denunciemos al 911 para que desde La Plata consideren que esta zona es peligrosa. Una cargada”, se lamentó una de las chicas consultadas.
Tras la reunión, los vecinos indicaron que se nota más presencia policial en la calle, “pero sabemos que esto es momentáneo y, lamentablemente, los robos se siguen cometiendo. El lunes nos juntaremos de nuevo en el barrio para ver los próximos pasos a seguir. Mientras tanto, estamos esperando que desde el área de Seguridad del municipio nos dé una respuesta”.
