La postal de la fiestas se ve intervenida por otra imagen que preocupa a secretarios y ministros de Salud, y también a intendentes: las largas filas en los puntos de testeo ante lo que sería el inicio de la tercera ola de Covid-19 en el país. La situación por ahora marca que las vacunas funcionan, porque si bien los vecinos se contagian, salvo excepciones, no desarrollan cuadros graves.
“Hay un crecimiento vertiginoso de los contagios y la tensión que eso genera en los centros de testeos, por lo que estamos ampliando los puntos y los horarios“, indicó esta mañana en el programa Caballero de día Lucas Ghi, intendente de Morón, uno de los municipios con mejor tasa de vacunación de la provincia.

El mandatario local explicó que “hasta el momento eso no se ve reflejado en hospitalizaciones, ni en cuadros severos ni en decesos. No obstante, hay que mantener más vigentes que nunca los cuidados y seguir con las vacunas“.
Es que en toda la Zona Oeste los índices de contagios confirmados se dispararon de manera abrupta y llegaron a cifras similares a las del 1 de agosto de este año, lo que significa el número más alto tras cuatro meses: el día de navidad entre La Matanza, Morón, Merlo, Ituzaingó, Hurlingham, Moreno, Tres de Febrero y San Martín tocaron un promedio de 596 test positivos.
Esto significa que en la región oeste del conurbano los casos se duplicaron en los últimos 10 días, ya que mientras el 15 de diciembre hubo un promedio de 299 contagios confirmados, para el 25 ya fueron 596 (99,3% más).
Es importante mantener el uso del barbijo y las medidas de cuidado. Seguimos con una intensa política de testeos, incluso en los días 24 y 31 de diciembre. pic.twitter.com/3AiBinzeny
— Diego Valenzuela (@dievalen) December 23, 2021
En los últimos días, los intendentes salieron a publicar los puntos para testearse en medio de una fuerte demanda de hisopados. Y en ese marco sigue subiendo la tasa de positividad que mide cuántas de las personas testeadas tenían el virus y que la Organización Mundial de la Salud sugiere que no supere el 10%.
En el conurbano oeste la situación es preocupante: Merlo llegó a una tasa de positividad del 25%, Ituzaingó rondó el 23,9%, mientras que Hurlingham se ubicó en el 22% y Tres de Febrero llegó al 20%. Debajo quedaron Morón con el 19,6%, La Matanza 19%, Moreno 18% y San Martín 17,5%.
En este contexto, ¿se puede pensar en restricciones? Ghi hoy no quiso pronunciarse al respecto. Sí opinó que “hay una voluntad masiva de cuidados, de usar barbijos, de la distancia, de esos hábitos que quizás llegaron para cuidarse. Los propios vecinos piden que se abran las ventanas en las reuniones”, pero lejos está de imaginar un nuevo confinamiento: “No me atrevo a aventurar ningún escenario, venimos de dos años muy traumáticos”.