La Policía Federal Argentina (PFA) detuvo a cuatro hombres y una mujer, acusados de realizar secuestros virtuales a través de llamados telefónicos con lo que se conoce comúnmente como “la llorona”. Operaban desde las localidades de Ramos Mejía y La Reja.
La estafa consiste en un llamado por teléfono por parte de los delincuentes a una víctima, haciéndose pasar por un familiar o conocido, aludiendo llantos desesperados de que el supuesto familiar o conocido había sido secuestrado. Luego, exigen un pago en dinero en efectivo como rescate para ser liberado.
De la investigación, se desprende que la banda realizó alrededor de mil llamados por día, buscando las coincidencias al oído de los estafados y cobrar cantidades considerables de dinero, sin realizar ninguna denuncia por parte de los damnificados. Sin embargo, una de las víctimas decidió hacerla, según indicaron fuentes policiales.
La denuncia dio lugar a una serie de pesquisas que llevaron adelante agentes del Departamento Antisecuestros con el apoyo de personal del Departamento Técnico del Cibercrimen y posteriormente con personal del Departamento Grupo Especiales (GE-1) y Grupos Especiales de Operaciones Federales (G.E.O.F.).
De esta manera, se estableció que dicha banda utilizaba inmuebles ubicados en las localidades bonaerenses de Ramos Mejía y La Reja, en los partidos de La Matanza y Moreno, respectivamente, para realizar las llamadas en distintas habitaciones y al mismo tiempo, como si fuera con un call center.
Con el total de las pruebas obtenidas, el Juzgado Federal de Campana a cargo de Adrián González Charvay, Secretaría Penal Nº3, de Felipe Scagliotti, ordenó dos allanamientos.
Durante el operativo, fueron detenidos cuatro hombres y una mujer todos argentinos y mayores de edad. Asimismo se secuestraron tres vehículos, trece teléfonos celulares utilizados en la maniobra, dinero en efectivo, documentación y otros elementos de interés para la causa.
Los detenidos junto con los elementos secuestrados quedaron a disposición del juzgado interviniente.