Este nuevo episodio de poliladrones comenzó con la paliza que recibió un hombre por parte de varios delincuentes en la puerta de una distribuidora de quesos y fiambres. Los ladrones se hicieron así de 3 millones de pesos que la víctima había cobrado en ese comercio. Luego, se produjo una persecución policial que logró detener a los sospechosos. Hasta ahí, la actuación de la Bonaerense había sido ejemplar, pero inmediatamente después todo cambió: los agentes dejaron escapar a los sospechosos y el dinero desapareció.
Tras la reconstrucción del caso, una policía y un chofer municipal quedaron acusados de haberse quedado con el botín. El asalto ocurrió este viernes pasadas las 11 la mañana en el cruce de la calle Río Salado y la avenida Bernabé Márquez, en la localidad de Loma Hermosa.
Fuentes judiciales y policiales informaron a Télam que todo comenzó cuando al menos dos delincuentes armados interceptaron a un empleado de una empresa proveedora que se retiraba de una distribuidora de quesos y fiambres tras cobrar una importante suma de dinero.
Uno de los ladrones lo golpeó en la cabeza con la culata de un arma de fuego y le provocó una herida cortante en el rostro y el cuero cabelludo, tras lo cual le sustrajo un bolso que contenía unos 3 millones de pesos. La víctima, de 46 años, fue asistida por una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) que lo trasladó a un centro de salud de la zona.
Según las fuentes, la banda escapó a bordo de un Fiat Uno rojo que abandonó en las calles Carlos Gardel y Río Salado, donde aparentemente cambiaron de vehículo para continuar la huida.
Sin embargo, una mujer aseguró al personal de la Comisaría 5ta. de Tres de Febrero que a dos de los ocupantes “se los llevó la Policía”, aunque no había ningún dato sobre su paradero.
A través del relevamiento de las cámaras de seguridad, los investigadores determinaron que en realidad los delincuentes fueron perseguidos por una camioneta del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) de la Municipalidad.
En las imágenes se vio el momento en el que una policía los identificó y los subió a ambos a la parte trasera del patrullero con un bolso negro. Se estableció entonces que los sospechosos fueron liberados a las pocas cuadras y que dejaron el bolso con el dinero en una vivienda de Loma Hermosa.
Con esos datos, el chofer del COM, identificado como Guillermo Pereyra (40), y la oficial que lo acompañaba, llamada Daniela Mancini (29), fueron aprehendidos. El Fiat Uno, que no tenía pedido de secuestro, fue peritado por personal de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) y los investigadores procuraban localizar a los delincuentes.
Trascendió que los sospechosos iban a ser indagados por la fiscal Marcela Costa, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del Departamento Judicial San Martín, por el delito de “privación ilegítima de la libertad”.
La policía fue desafectada de sus funciones por Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense, en tanto que el dinero fue recuperado tras un allanamiento en la vivienda donde había sido dejado por los sospechosos, añadieron los voceros.
La palabra de la municipalidad
A través de un comunicado, desde la municipalidad de Tres de Febrero informaron que dieron aviso a la Justicia cuando advirtieron la secuencia “en medio de la persecución de estas personas, que escapaban a bordo de un vehículo, y que posteriormente fueron detenidas por una patrulla en la que se dirigían una agente de la Policía bonaerense y un chofer. El dinero robado, denunciado por el dueño del comercio, no se encontró en ese momento”.
“Así es como la Municipalidad, a través de su Secretaría de Seguridad y su Centro de Monitoreo, aportó información y pruebas fílmicas de cámaras municipales y privadas para la investigación. Más tarde se halló parte del dinero en una vivienda que estaría vinculada al personal que realizó la persecución. La agente de la Policía bonaerense y el chofer involucrados ya están a disposición de la Justicia”, resumieron.
