Un joven de 22 años de nacionalidad paraguaya que era buscado por el crimen de un policía ocurrido en La Matanza hace unas semanas, fue acribillado de seis balazos en la zona de Cuartel V, en el partido de Moreno.
El crimen se produjo este lunes en una zona descampada situada entre las calles Juan Racine y Portugal, y tuvo como víctima a Ronal Fernando Suárez Ortigoza, indicaron fuentes policiales a No Ficción Web.
Las principales sospechas apuntan a que el hecho se produjo en el marco de una venganza en torno a actividades de narcotráfico. En el caso tomó intervención la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 2 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez.
El joven había llegado hasta ese lugar a bordo de un remís junto a su novia, una chica de 19 años de la misma nacionalidad, desde la zona de Transradio (localidad de Nueve de Abril) en Esteban Echeverría, donde vive la chica. La pareja se había trasladado hasta Cuartel V, supuestamente para cobrar un dinero que le debían a un primo del muchacho.
Según le dijo la joven a la Policía, su novio, quien vivía en el barrio porteño de Barracas, se bajó del auto, caminó unos cien metros y se escucharon varios disparos. Enseguida, la chica le pidió al chofer que la lleve a una comisaría a denunciar lo ocurrido. Si bien el conductor del auto la llevó a la seccional, en cuanto la muchacha se bajó del vehículo, el hombre se marchó.
Instantes después, policías que acudieron al lugar se encontraron con el cuerpo de Suárez Ortigoza, sin que se pueda dar con los autores del crimen. El joven había recibido al menos seis disparos, tres de ellos en la cabeza, y los otros en el pecho, el abdomen y la pierna derecha. En el lugar, los peritos hallaron un total de once vainas servidas.
Enseguida constataron que el joven asesinado era buscado por el crimen del policía bonaerense Nazareno Zucarelli, ocurrido en julio del año pasado en un descampado de la localidad de Rafael Castillo, en La Matanza.
El policía de 23 años fue asesinado de un tiro en la cabeza cuando junto a otros efectivos intentó identificar a un grupo de hombres en las inmediaciones de un cementerio abandonado que aparentemente era un punto de venta de drogas.
