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La Cámara de Apelación y Garantías de La Matanza anuló el fallo que declaró inimputable a un hombre de 78 años que asesinó de 11 puñaladas a su pareja, María Dolores Juncos, en septiembre de 2020 en Isidro Casanova, por lo que ahora el fiscal de la causa pedirá su detención.
La Sala I de esa cámara, presidida por el juez Gerardo Lucio Frega, hizo lugar a un planteo presentado por el fiscal de la causa Alfredo Luppino para que se “revoque el sobreseimiento” y “se haga nula la excarcelación” de Ramón Hermes Acuña, de 78años, quien había sido considerado “inimputable” en febrero pasado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de La Matanza.
Ante tal situación, los camaristas señalaron que “debe dictarse un nuevo pronunciamiento”, por lo que remitió nuevamente las actuaciones al TOC 1 para que inicie el juicio de cero. Sin embargo, el Tribunal que el 22 de febrero último había sobreseído al hombre de 78 años, se excusó para seguir interviniendo en el caso y pidió que se sortee a otros magistrados para que resuelvan.
“El decisorio de grado debe ser revocado, desde que la medida de discutir la posible imposición de una medida de seguridad implica la observancia de las reglas del debate”, aseguraron los jueces de la Sala I de la Cámara de Apelación y Garantías de La Matanza.
En tanto, fuentes judiciales adelantaron a Télam que el fiscal Luppino pedirá la detención de Hermes Acuña en cuanto se haya constituido un nuevo tribunal.
“No puedo más de la emoción”, dijo a Télam la hermana de la víctima, Karina Juncos luego de enterarse del fallo.
El pasado 22 de febrero, Acuña había sido considerado “inimputable” a pesar de que estaba acusado de ser el autor del “homicidio agravado por el vínculo de pareja existente con la víctima y por haberse perpetrado contra una mujer por un hombre, mediando violencia de género” en perjuicio de su pareja.
De acuerdo a la pericia, Acuña “no obró por voluntad ni libertad de conciencia”, sino que estuvo “condicionado por síndrome delirante celotípico montado en personalidad premórbida de tipo narcisista”.
Tras ser considerado “inimputable”, Hermes Acuña volvió a vivir nuevamente a la casa donde María Dolores fue asesinada, lo que provocó gran dolor en la familia y miedo a que pudieran sufrir algún tipo de ataque por parte del femicida.
“Estamos aterradas. Tenemos mucha angustia y desesperación. Él está libre y sabe exactamente dónde vivimos. Después de lo que hizo, no sabemos qué esperar de un tipo así”, había dicho a Télam Karina, hermana de la víctima, a la vez que añadió: “Nos enteramos que el tipo se fue de vacaciones a Corrientes después de que lo liberaron, es como si no hubiera pasado nada”.
El hecho sucedió el 15 de septiembre del 2020, cerca de las 11 de la mañana cuando una empleada de limpieza que trabajaba en el inmueble de Acuña escuchó gritos y junto con la hija del hombre encontraron a María Dolores fallecida en la cama.
A su lado, se encontraba con heridas en la garganta Hermes Acuña, quien intentó suicidarse tras asesinar a su pareja.
Cuando efectivos de la comisaría de San Alberto oeste 4ta. arribaron al lugar, constataron que la mujer había fallecido a causa de 11 heridas de arma blanca, mientras que Acuña fue trasladado de urgencia al hospital Paroissien, donde se recuperó y fue trasladado a la Unidad Penal de Melchor Romero hasta que fue liberado el 22 de febrero pasado.
