Un ciervo recorrió las calles de Merlo, en las cercanías del barrio Villa Angélica, de Pontevedra. El cérvido de 200 kilos fue grabado por un vecino, mientras trotaba por la ruta provincial 21.
Según trascendió, el animal pertenecía a un hombre reciéntemente fallecido, que lo tenía junto a otros animales en una quinta de la localidad. La policía fue advertida por los vecinos y procedió a capturarlo.
La pandemia parece brindar un buen escenario para este tipo de paseos, ya que días atrás un ñandú fue visto en las calles de Parque Leroir, en Ituzaingó.