El presidente del Consejo Escolar de Hurlingham, Jorge Verón, explicó en diálogo con No Ficción Radio los alcances de la declaración de la Emergencia Educativa aprobada por mayoría en el Concejo Deliberante local el pasado jueves 12. Además, el dirigente aseguró que la grave situación no escapa al resto de los distritos de la provincia de Buenos Aires.
“Me gustaría no ser tremendista pero todas las acciones del gobierno nacional y provincial son en contra de la educación pública. El ejemplo más claro es que hace más de 80 días que la gobernadora María Eugenia Vidal no convoca a los gremios a discutir paritarias”, sostuvo Verón el sábado pasado en FM Fribuay. Vale decir que la mandataria se vio obligada a pactar un encuentro con los sindicatos docentes para el próximo lunes 23, tras un fallo de la justicia que ordenó a la Provincia reanudar las negociaciones.
El presidente del Consejo Escolar explicó los serios problemas edilicios que pesan sobre las escuelas tras dos años y medio de gestión de Cambiemos: “Faltan aulas para poder cumplir con la nueva ley que prevé una secundaria de 6 años. En Hurlingham faltan alrededor de 25 aulas para albergar a los alumnos y eso habría que multiplicarlo por todos los distritos del Conurbano”, precisó y admitió que “esto hace que peligre la terminalidad. Que cada vez sean más los jóvenes que no acceden a la educación siendo el Estado quien debe cumplimentar este derecho”.
Verón también se refirió a la reciente investigación de No Ficción respecto a la necesidad de la construcción de jardines de infantes en la zona oeste. “Hay un promedio de 50 niños y niñas en lista de espera en cada jardín. El presidente Mauricio Macri prometió 3.000 jardines nuevos pero el ministro Alejandro Finocchiaro, que pasó de Provincia a Nación porque cuando no haces bien las cosas este gobierno te premia, dijo que lo evaluó mejor y que sólo se van a hacer aulas. Todo esto en el marco de un achique fenomenal de la obra pública”, analizó.
“Tenemos jardines que nunca se terminan”, se quejó el funcionario y mencionó, a modo de ejemplo, el caso de un “jardín histórico de William Morris que fue tirado abajo y los chicos están transitoriamente en una capilla en condiciones precarias, en términos pedagógicos y edilicios, porque se llueve todo. Se firmó un comodato de siete meses y las obras están paradas”.
“La declaración de la Emergencia Educativa es para tratar de visibilizar la situación. Es mucho el daño que se hizo en dos años de gobierno y el desmantelamiento de programas educativos, como conectar igualdad. Además, falta equipamiento, tenemos problemas de infraestructuras, se dejaron de entregar libros, hay un achique feroz de personal. Quieren desarmar el sistema público. Entonces la idea es generar un espacio donde la comunidad nos informe y se actúe en consecuencia”, sostuvo.
El proyecto de resolución mencionado fue elaborado por el bloque del Frente para la Victoria – Partido Justicialista junto a los sindicatos docentes, según informaron desde el oficialismo. Los concejales de Cambiemos, por su parte, votaron en contra de la iniciativa, mientras que Unidad Ciudadana y el Frente Renovador lo hicieron de manera afirmativa.
El informe en el que se basó el proyecto, advierte “la paralización de las obras de infraestructura escolar en el distrito; la crítica situación del Servicio Alimentario Escolar (SAE) que requiere 3000 nuevos cupos y más fondos para cubrir la necesidad alimenticia; la ampliación de cobertura para los cargos; la reforma unilateral en el Bachillerato de Adultos, que cercenó el derecho a la educación a más de 400 estudiantes; la reforma del rol de los Equipos de Orientación Escolar; la disminución de horas en el plan de estudios de la currícula de educación técnica; y la inequidad del sistema de licencias establecido”, entre otras cuestiones.
Al ser consultado por el SAE, Verón ratificó que “el Estado provincial debe hacerse cargo, Vidal quiere municipalizar el servicio y le han quitado al Consejo el manejo. De todas formas articulamos los reclamos de las escuelas que nos llegan y tenemos un compromiso de que los chicos coman en tiempo y forma. Pero el gran problema que hoy tenemos son la cantidad de cupos, hay una fuerte presión por los chicos que necesitan quedarse a comer en las escuelas y los alimentos que no alcanzan”.
El presidente de Consejo recordó las múltiples denuncias que pesan sobre algunas administraciones municipales por la supuesta sobrefacturación en los alimentos del SAE. “Esto está ocurriendo en Ituzaingó y Morón, en este último es un escándalo lo que pasó. Sacaron a los históricos proveedores para que entren grandes empresas de capital, tienen algún tipo de arreglo con el oficialismo. Esto está generando un gran negocio alrededor de la alimentación de los chicos. Debe tomarse en serio. Es un tema muy sensible”, subrayó Verón, y concluyó: “Hurlingham no es una isla, lo mismo pasa en el resto de los distritos. Nuestro desafío es poder darle visibilidad a los problemas y armar una fuerza de resistencia para denunciar e intentar torcer el rumbo”.
