La poetisa, cantautora y dramaturga nació el 1 de febrero de 1930. Fue hija Lucía Elena Monsalvo y de Enrique Walsh. Como empleado del departamento contable del Ferrocarril Oeste de Buenos Aires, su padre compró la casa en 1925 a la propia firma inglesa en la ciudad de Villa Sarmiento, en el partido de Morón. Allí transitó sus primeros años María Elena.
Recuperar la casa de María Elena Walsh resultó en un trabajo de investigación, de atar cabos, unir intuiciones y concretar negociaciones. En el 2015, antes que concluyera la gestión de Ramiro Tagliaferro, el equipo que hoy acompaña al intendente Lucas Ghi comenzó una investigación sobre el inmueble ubicado en la calle Tres de Febrero 547. “Teníamos la certeza de que era la casa de María Elena Walsh por lo que los mismos vecinos iban contando. Pero la realidad es que hasta ese momento no teníamos nada seguro. No había ningún papel que pudiera constatar eso”, cuenta a NF Victoria Babjaczuk, Directora de la UGC 7 de Villa Sarmiento. Victoria tuvo entre sus tareas, la de rastrear títulos de propiedad de lo que, hasta ese entonces, era rumor en el barrio.
La casa perteneció en sus orígenes a la New Western Railway of Buenos Aires, la compañía británica que en 1890 adquirió la gestión de lo actualmente es el Ferrocarril Sarmiento. “Encontramos las escrituras donde figuraba que esa era la casa que había adquirido la familia Walsh y también algunos documentos catastrales que dan cuenta de la operación entre el padre de la escritora y la empresa ferroviaria”. María Elena no sólo vivió ahí, sino que allí nació. Esto se corroboró gracias la partida de nacimiento que figura en los registros de Villa Sarmiento. “En esos libros que ahora están en el registro civil de Haedo, se indica que María Elena Walsh nació un primero de febrero de 1930 en esa misma casa”. También allí nació Susana, su hermana menor.
De ahí siguieron las negociaciones con los propietarios de la vivienda. “Queríamos ver si existía la posibilidad de comprar la casa y de convertirla en un espacio cultural abierta la comunidad”, explicó la funcionaria municipal. El proyecto, promovido por el gobierno local, obtuvo el financiamiento del Ministerio de Cultura para la compra y cesión del inmueble. Las tareas de refacción y puesta en valor se están haciendo con el aporte del Ministerio de Obras Públicas. El proyecto fue adjudicado en licitación pública a la empresa Majo Construcciones SA, por alrededor de 88 millones de pesos. El Municipio también firmó con la Provincia de Buenos Aires un convenio de colaboración para el equipamiento y la programación de actividades una vez que finalicen las obras.
Una típica casa chorizo con habitaciones que dan a una imponente galería. En general, los pisos y las aberturas se conservan. Al este y al oeste/ Llueve y lloverá/ Una flor y otra flor celeste/ Del jacarandá. La obra preservó cuidadosamente el famoso Jacarandá que, posiblemente, María Elena Walsh evocó en su famosa canción. Entre los planos originales y el estado actual de la casa, no hay grandes modificaciones. Más allá del deterioro propio del tiempo. En un galón al fondo, se encontraron algunos viejos objetos que permanecen en el Museo de Morón. Una heladera, una máquina de coser y una lámpara araña. Se los analiza para determinar si pertenecieron a la familia Walsh. “El trabajo de restauración se hace en base a los modelos y a los planos de la casa original. Todo se va a reconstruir con el mismo estilo de la época, lo que tratando de conservar los mismos colores, todo lo que en esos tiempos se usaba”.
El proyecto de recuperación arquitectónica tiene como objetivo “reflejar una casa típica de 1930 que permita evocar el ambiente familiar que transitó María Elena. A la vez, que podamos mostrar su vasta trayectoria artística”. La intención es que cada rincón evidencie a la cantautora, a la escritora, a la poetisa, a la dramaturga que fue Walsh. Además de la restauración, se construyen seis salas para muestras y eventos, un Salón de Usos Múltiples, galerías y pasillos para exposiciones y actividades artística.
La artista vivió en la calle Tres de Febrero por 10 años. Luego, junto a su familia, se mudó a un departamento en Ramos Mejía. “Todos sabíamos que María Elena había vivido acá, pero el hecho de haber concretado la adquisición de la casa nos permitió conocer un montón de otras cosas que no conocíamos. Por ejemplo, que María Elena había nacido en Villa Sarmiento y que los diez años en lo que vivió allí, fueron semillero de todo lo que fue su obra posterior. Evidentemente en esa casa ella transitó una infancia sumamente feliz. Eso se puede notar en sus obras autobiográficas. Es lo que de alguna manera le permitió desplegarse en términos artísticos. Para los moronenses es un orgullo enorme saber que en este barrio ella pudo forjar una infancia que después le permitió tener la adultez que todos conocemos”.
Las obras de recuperación están llegando a su fin. Las puertas de la casa de María Elena Walsh estarán abiertas a la comunidad el próximo 17 de julio. Ese día, el Municipio de Morón en articulación con el gobierno Nacional y de la Provincia de Buenos Aires, llevarán adelante el acto inaugural.
