Persianas bajas y carteles de alquiler. La postal resume lo que dejó para el comercio la crisis del dólar, su impacto en la inflación y la caída del consumo. El oeste no es la excepción y las vidrieras tapiadas en la emblemática Avenida de Mayo, de Ramos Mejía, es toda una pintura de los tiempos que corren.
El aumento en los servicios y los contratos de alquiler, sumado al incremento de los costos para reponer mercadería y un drástico descenso de la demanda son el mix que estalló en los primeros días de 2019 y su onda expansiva dejó muchos locales forrados de cartón.
Un reciente informe de la ONG Defendamos Buenos Aires arrojó que solo en Ramos Mejía cerraron 43 locales que se dedicaban al menos a seis rubros diferentes. “Avenida De Mayo en las primeras tres cuadras está bastante completo, pero al 400 comienzan a verse locales vacíos. Y en las laterales hay entre dos o tres comercios sin alquilar por cuadra”, confirmó a No Ficción el presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Ramos Mejía (Acirm), Osvaldo Gilges. Dueño de una conocida inmobiliaria de la zona, Gilges explica que “con la explosión del dólar hubo un parate muy grande”.
Relevamiento propio sobre los locales que están en alquiler.
Algunos comerciantes perdieron su ubicación para pasar a un local más alejado y reducir así el alquiler; otros directamente, ya no están más. Una concurrida casa de electricidad de Ramos decidió achicarse y cerrar su sucursal de Avenida de Mayo para replegarse en su local histórico en una de las arterias transversales. En la misma cuadra una librería se despidió por completo: No pudo afrontar el alquiler del local que por sus dimensiones supera los 40 mil pesos mensuales.
“Cada local tiene un dueño y tres empleados promedio, lo que significa que se perdieron más de 10.000 puestos de trabajo. Es el peor número desde que comenzamos a hacer este relevamiento hace cinco años”, señaló el abogado Javier Miglino, titular de la ONG Defendamos Buenos Aires, en relación al estudio realizado en Capital Federal, el Conurbano y La Plata.
Economía y municipios
José María Sacco, presidente del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos del Departamento Judicial de San Martín, sentenció: “El 40% de los locales de Tres de Febrero tuvo que cerrar este último año”. Sacco confirmó a No Ficción que en los distritos bajo su órbita (San Martín, Tres de Febrero, San Miguel, Malvinas Argentinas y José C. Paz) “cada vez hay más locales vacíos porque los negocios están vacíos”. Para el colegiado “el gran problema son las tarifas” ya que “el alquiler pasa a un segundo plano, aunque a la gente le cuesta pagarlo por la inflación”.
¿Pueden los gobiernos municipales activar políticas para evitar estos cierres? “El municipio no sé si puede dar una mano, quizás con los impuestos o la habilitación” señaló Sacco al mismo tiempo que reconoció que “lo bueno sería que haya créditos” y se lamentó por la fallida experiencia de los UVA.
“Si bien en la segunda mitad del 2018 ha habido un menor nivel de actividad comercial, la situación no ha sido homogénea. Algunos comercios atraviesan una situación más difícil pero también hay muchos otros que en este contexto están sosteniendo sus ventas o expandiéndose ya sea con nuevas líneas de negocio, nuevos productos o nuevos servicios”, puntualizó optimista Daniela Ramos, secretaria de Desarrollo Económico de Tres de Febrero.
Consultada por este medio, la funcionaria indicó que el intendente Diego Valenzuela “creó apenas asumió la dirección de Promoción del Comercio con el objetivo de contar con un área destinada exclusivamente a trabajar con los 12 centros comerciales del distrito” y destacó que la comuna haya implementado en 2018 una reducción de tasas para ciertos comercios. Además, subrayó que a fines de 2017 el municipio haya lanzado la tarjeta 3F Ahorro que “permite a los vecinos comprar con descuentos en los comercios barriales adheridos”.
Ciudades del oeste en cifras
Del relevamiento realizado por la ONG que dirige el abogado Miglino se desprende que en enero en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bajaron sus persianas unos 2536 comercios: es decir, un promedio de 82 negocios por día. Los datos fueron recabados en 34 localidades, varias de ellas del oeste.
De este estudio se incide que La Matanza fue uno de los distritos de la región más golpeados con 278 comercios menos: 49 de La Tablada, 43 de Ramos Mejía, 41 de San Justo, 39 de González Catán, 37 de Isidro Casanova, 36 de Gregorio de Laferrere y 33 de Lomas del Mirador.
Según el informe, Morón le sigue con 112 cierres: 50 del centro de Morón, 32 de Castelar y 30 de El Palomar. En el partido de Tres de Febrero, en tanto, cerraron 73 locales: 35 en Ciudadela y 38 en Caseros. Moreno perdió 69 negocios, mientras que Merlo 49 e Ituzaingó 23.
